Escribo para que con el tiempo, no se me olvide cómo llegué a descubrir que las elecciones son el motor de mi mundo. La vida me entrega la posibilidad de poder elejir, algunos dicen que las elecciones sólo están en aquellos que tienen el "poder", pero aquellos que tienen el poder no pueden elejir por mi qué comer, qué vestir, qué amar, por quién preocuparme, qué pensar, qué sentir... en fin, este último tiempo he tomado conciencia de qué es lo que realmente quiero, si las desiciones que tomé, estoy tomando y tomaré en un futuro las hago en base a lo que siento, en base a lo que pienso, en base a un impulso, en base a una percepción? Hacerlo en base a lo que siento es una de las mayores razones que tengo, y paradójicamente la fuerza inherente que esa desición trae consigo, es lo que logra el "cambio" tan ansiado e intuído. El universo tomando consciencia de sí mismo, encontrando la perfección en el eterno cambio de las imperfecciones, el orden en el desorden, venciendo las dualidades y logrando la analogía. Cada vez que me dispongo a desidir, ya lo he hecho, por lo tanto lo que verdaderamente estoy haciendo, es comprender el "por qué tomé esa desición", ahí es donde empieza el viaje al corazón. Un viaje al interior... para encontrar el exterior.
